JAVIER.- ¡Hummm!... ¡Me parece oler a compota de ciruelas! EMILIA.- Huele a compota de ciruelas. La estoy preparando para la cena. ADELA.- Ven aquí, mamá. Estamos en pleno ataque de nostalgia. Siéntate con nosotros. EMILIA.- No puedo. Seguir charlando hasta que papá se levante. Habrá oído el piano y ya veréis con qué humor aparece. ADELA.- ¡Vaya! He debido hacerlo peor de