está chistoso el cajoncito. Mire no más cuánto tiempo gastaban los antiguos en estas ocurrencias... Todo de puros cachitos. Una mañana subió Ausencia. Se arrodilló junto a la cama, a la altura de mi cabeza sobre la almohada y desperté con el rostro de la cocinera esperandome, ese rostro gris, viejo, grueso. --¡Ya me voy, señorita! --¿Qué te pasa, Ausencia?
DIE:160.04
DESPERTARI.1 - Interrumpir o hacer interrumpir el sueño y (de)volver a la consciencia