cosas no fueron del todo mal, porque la pendiente era suave y la visibilidad relativamente buena, pero poco a poco se fue haciendo aquélla más pronunciada y cerrandose la niebla. Empezamos a darnos morrones contra los árboles y a tropezar con piedras y raíces y a meter los pies en hoyos y fangales. Afortunadamente, las blasfemias que íbamos profiriendo los tres a cada rato impedían que nos distanciáramos los unos de los otros, con fatales consecuencias. También jugaba a nuestro favor
LAB:220.30
TROPEZAR.1 - Golpear de forma accidental [los pies] [contra un obstáculo] al andar, de modo que se produce un desequilibrio