escrito seis cartas sin respuestas, pero se conformó con la comprobación de que él las estaba recibiendo. Dueña por primera vez de su destino, Angela Vicario descubrió entonces que el odio y el amor son pasiones recíprocas. Cuantas más cartas mandaba, más encendía las brasas de su fiebre, pero más calentaba también el rencor feliz que sentía contra su madre. "Se me revolvían las tripas de sólo verla --me dijo--, pero no podía verla sin acordarme
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MANDARII.1 - Enviar. Hacer que [algo o alguien] vaya a cierto sitio