maligno y de algún modo ligarme con el pasado proscrito, ello se debió a la obediencia hacia un código interno que, dirigiendome hacia la justicia, me apartaba de la molicie general. Repitiendo "Si lo viera César" aludo hoy a don José Félix de Lequerica, primer artífice de las relaciones hispanoamericanas, forjador de una política internacional que, por encima de todas las diferencias políticas, fue llevando a España desde la perrera hasta ocupar una posición privilegiada en el mundo