Nunca me ondulé; sólo cortar... Si llega a ponerse todo bien blanco será bonito. «Suelto, suelto, es como me gustaría a mí verlo», piensa el viejo. Pero habla de su nieto, de su cabecita más bien rizada. -Yyaanda,¿sabes?Desdeanoche,paramí solo. -¡Estarás contentísimo! No necesita decirlo; pero se plantea un problema. Un niño que ya ha empezado a andar