, la única para el enemigo. Esta posición es buena y aún podríamos mejorarla. David tendía a ras de tierra cordeles atados a una bomba de mano: si explotaba era que venían los tedescos. Ambrosio ideó hacerle otra salidaalagrutadeMandrane.Porellaescapamosde los lanzallamas cuando nos traicionó aquel infiltrado, un fascista de Santinara... ¡ El Ambrosio! andará pensando ahora que he desertado, que no vuelvo a morir a mi puesto... ¡