preparado a requerimiento del hijo de David, él, sin reflexionar, sin detenerse a considerar que una taza de té era lo más aconsejable, saludable, inocuo que podía tomar, se limitó a decir: --No, gracias. III --Siquierestriunfar,tienesqueaprendermásinglés... --dijo Julián lánguidamente. Estaban sentados en una terraza de Recoletos. La primavera brotaba en los parterres y las muchachas pasaban envueltas en los colores de mayo. --Ya