Milán y, encima, son asesinados por la burricie de los oficinistas y escribidores. El muchacho es dócil y nada torpe. «Así crecerá mi Brunettino, sólo que sabrá mucho más; yo le enseñaré... Y a éste se le puede ayudar, aunquenohayderechoatrabajarenloqueno se conoce. Pero no es culpa suya y, además, no es milanés.» Concluida la tarea, el muchacho le da las gracias y propone: -
SON:117.17
TRABAJAR.1 - Realizar una actividad que requiere esfuerzo