país, mientras que procurar la salud del pueblo -si se dice del ejército y no de la sanidad civil- suena a volver quirúrgicamente las armas contra el pueblo mismo para extirpar de sus carnes los elementos infecciosos o cancerosos que amenazan desautentificarlo Traducir 'salvación' podría haber quedado, cuando menos, equívoco, y 'salud' suena como mucho más preciso y apropiado si por función definitoria del Ejército deja, en efecto, de tomarse la defensa de las fronteras contra