se fuere, porque no puede ocultar su resabor de producto derivado tal vez de cierta materia prima, pero manufacturado despiadadamente por la afirmación; tal presunta materia prima, si es que en verdad la hubo, ha sido cuando menos seleccionada, depurada, esterilizada, concentrada, enlatada y etiquetada; y eso en el mejor de los casos, porque no faltan consumidores hipersensibles, aprensivos o suspicaces que acusan la presencia de aditivos y hablan incluso de adulteración. Mas sobre esto juzgue mejor