CHUSA.- Te caerías y te partirías una pierna. JAIMITO.- ¡Mejor! Cojo, manco, tuerto... Parecería el terror de los mares, cañonazo va, cañonazo viene, a todos los cabronazos con dos ojos, dos piernas y porvenir, que se me pusieran por delante. A esos dos los primeros, y a la madre, y al padre... ¡A todos! ¡A todo el que se me pusiera por delante! Ya sabes cómo las