fábrica de textiles de su propiedad, para demostrar que no sólo podía hacer buenas lanas que pusieran en el orillo made in England. Cuántas noches lo he lucido en el Liceo. ¡Ay! ROCIO.- A mí me lo regaló mi Pepe con el primer dinero que ganó en Alemania. Porque los veintisiete mil quinientos que yo tenía, me entró una noche un arrebato muy grande y los tiré. Menos dos que le di a la Macarena. Y ni ay ni