era más poderoso que cualquier esperanza de acción. Estaba cansado, cansado, desde muy pequeño, desde el origen de su memoria, cansado de sus recuerdos y de su cuerpo, cansado de caminar toda la noche, cansado de no entregarse a purgar su culpa, cansado de portarla como lastre a lo largo de toda la caminata. La culpa es inapelable, sin rostro, sin figura, su presencia es el águila que planea. Sólo si uno se expone a
MIR:104.29
ENTREGAR.1a - Rendir(se). Dejar de ofrecer [oposición o resistencia]