también rubio y adolescente, el mismo que yo encontré un día vivo aquí, entre estas enormes montañas de los Balcanes? Yo no podía saber por entonces, Francesca, que la imagen dramática que ibas a ofrecerme no tardando mucho negaba el ángelmúsico colgado en tu cuarto y que éste ocultaba a un ser real, a un ser que llegaría a encontrar más tarde, a otro ángel --Betina-- que a su vez había anulado con su presencia la visión de los dos