se escenario de un drama inesperado y terrible y él, instigador y causante del mismo, sentado en el sofácama, lima que lima, sumido en la contemplación egoísta de sus manos, con una indiferencia rayana a la perversidad. Había que rendirse a la evidencia: el espacio material de su desaguisado había dejado de interesarle después de la alevosa perpetración. Como si no fuera obra de él, yacía disperso, en el olvido. Había bostezado inmediatamente después, repantigado aún
PAI:016.29
RENDIRI - Dejar de oponer resistencia en una lucha o competición