a no tener vigencia. En los últimos años ha aparecido un tercer término: la dictadura burocrático-militar que, por un colosal equívoco histórico, llamamos «socialismo». Para comprender más cabalmente los términos de la disyuntiva histórica a que se enfrentan nuestros pueblos, no tengo más remedio que repetir, brevemente, algunos de los conceptos de otro ensayo, América Latina y la Democracia, que aparece en otra parte del presente libro. La inestabilidad política de nuestros países comenzó al otro día