Ya puedes mirar», anunció entre risitas, y añadió: --¡Mis flores! Se había alzado el camisón hasta el pecho y del vientre había despegado las vendas que protegían las llagas de la operación. Miguel, turbado, desvió la mirada, y oyó cómo la abuela, alborozada, decía qué bien huelen mis florecitas, qué colores tan bonitos. Muy pronto ella se cubrió con las sábanas y explicó que había que cuidarlas mucho. «Son muy delicadas.
TER:104.26
DESVIAR - Apartarse del camino, dirección o destino