el suelo un lago plateado; la cuna y su sombra una isla de roca. En la almohada hecha espejo se refleja serena la copia de la luna, esa carita dormida y tibia cuyo aliento acaricia la vieja faz que se ha inclinado a olerla, a sentirla, a calentar junto a ella los viejos pómulos. «¿Lo ves?», susurra el viejo. «Aquí tienes a Bruno. Se acabó el avanzar solo y perdido. ¡ Avante,
SON:068.03
INCLINARI - Modificar la posición vertical u horizontal de un objeto