Texto contextualizado: |
te cruzas con ellos en el mercado o la calle, salúdales y finge un interés real por sus problemas familiares. Si vives solo, inventate una esposa tranquila y hogareña, consagrada enteramente a sus labores domésticas y ocupaciones femeninas. Da muestras de humanidad, dulzura y benevolencia: manifiesta cariño y simpatía por los animales, asomate de vez en cuando a los jardines públicos y juega con los chiquillos. Charla pacientemente con sus madres, imita la sonrisa inefable de los querubines |
PAI:172.14 |