ojillos chispean astutos entre los párpados semicerrados y el modelado de las arrugas se ha convertido en piedra viva. -Se puede, se puede -repite esa voz tajante-. Siempre se puede, cuando se quiere. El puño se cierra despacio bajo la mano de Hortensia posada en él y delata toda la voluntad que lo endurece. -Ten cuidado... Ellos son los padres. Mandan en su hijo. -También mandaban los tedescos. Eran los amos, ¿recuerdas?
SON:207.05
CERRAR.2a - Juntar [los componentes de los que están formadas algunas partes del cuerpo]