, de ésos no hubo. --Catanzaro fue una ciudad bizantina, amigo Roncone. --Si usted lo dice... Pero allí nadie les mienta. No les haríamos tanta guerra como a los moros. Ya funciona la máquina, ya giran las implacables ruedas. --¿Guerras? ¿Por qué motivo? --No hacía falta. En aquel tiempo ellos eran moros y nosotros cristianos, ¿le parece poco? Advierte que su auditorio no comprende. Se explica: --Siempre