me alegro de que no los tengan en este museo: se sentirían como presos.» De pronto, aguza el oído. Estos tabiquillos de ciudad permiten oírlo todo. Renato y su mujer en la alcoba. -¿No duermes, Andrea? -Para lo que te importa... -Mujer, me acosté cansado... ¿Estás mala? -¡Estoy harta!... Lo del otro día fue el colmo. Nos va a enemistar con todo el barrio. ¡
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DORMIR.1 - (Hacer) Entrar en un estado de reposo y suspensión de la conciencia