sobre rieles daban en el blanco. "¡En la madre! --pensó--. Sólo nos falta la Luftwaffe con sus obuses. Atrás, atrás --los perros, perdón, los hombres miraban sin comprender--, tenemos que regresar a las líneas aliadas, larguense, les digo, esto es una equivocación monstruosa, los alemanes están encima de nosotros, qué patrulla ni qué nada, qué infiltrarnos en las líneas enemigas si los enemigos están aquí en nuestras narices