se identificación. Observarás que algunos comunican entre sí con ademanes y gestos en su alfabeto próximo al de los sordomudos; otros, se sirven de esa especie de taquigrafía sonora, hecha de breves o largas modulaciones agudas, que los indígenas guanches usaban quizá desde antes de la llegada de los conquistadores y que, a fin de liquidar de una vez para siempre las viejas y absurdas querellas lingüísticas de tus compatriotas, debería ser proclamada solemnemente el idioma oficial de la fatídica e incorregible Península