ver con suspender el trabajo. Mucho con la evasión del horario conocido, del monótono escenario que nos apresa. El cristal empañado al levantarnos, el buzón de correos en la acera de enfrente, el chino de la lavandería que sonríe al quitar el cierre. Y al regresar cada tarde, la misma soledad o la misma insoportable compañía. Necesitamos creer que va a suceder algo. Nos lo promete la luz que hemos estado acechando durante tanto tiempo, la luz que se
JOV:152.18
SONREÍR.1 - Reír suavemente, con el gesto pero sin emitir sonidos