a la puerta cerrada tratando de serenarse. La madrugada era fresca pero espantó la idea de subir por un jersey: la casa estaba clausurada y jamás volvería a ella. Un automóvil cruzó ante él. Apenas un metro de penumbra le separaba de la acera. Tuvo miedo, un miedo glacial y constante. En la confusión de su mente y el enturbiamiento de sus emociones le sorprendió una interrogación fría, casi ajena: qué hubiera sucedido en el caso de haber aflojado las manos
MIR:064.23
SEPARAR - Alejar una entidad de otra con la que mantiene una relación de parte-todo