sus proyectos por la celeridad de las entidades financieras para recuperar los fondos, tal como acaba de suceder con los bienes de la firma Pescamarín. El representante de la cooperativa viguesa rechaza cualquier insinuación respecto a la morosidad del sector, aunque abunda en que los impagos proceden sobre todo de armadores que sufren problemas de liquidez causados por las medidas de restricción del crédito y por los costes que conlleva mantener a una flota en situación de amarre forzoso "y sin perspectivas alentadoras". Las