la boca.) ROSA.- (Riendo.) ¡Es que tú te adelantas! (Le toma la cabeza y le devuelve el beso. Sigue su camino.) NÉSTOR.- (Risueño.) Y tú te retrasas. ¿No será... que tienes a otro hombre entre ceja y ceja? ROSA.- ¿Yo? ¡Ya me dirás quién podría ser! (Ante el sofá, mira Las Ninfeas.) NÉSTOR.- Uno que te