(Melancólica.) Si no llama habrá que ir a su encuentro. ¿Y tú, Dionisio? (Se acerca a él.) ¿Vendrías? ¿Te atreverías a buscarla conmigo en esos refugios donde tal vez la retienen? [ NÉSTOR.- ¿Qué refugios? DIONISIO.- No olvides que estoy cojo. ROSA.- ] ¿O también prefieres esperar a que llame a esa puerta? DIONISIO.- No, no... Sólo que convendría averiguar