espalda, le aprieta aún más los hombros.) A tiempo. DIONISIO.- Es fácil hablar así con tus dos piernas. [ NÉSTOR.- Lord Byron era cojo y fue amado. Nelson era manco y tuerto: le adoraron las mujeres. DIONISIO.- No eran relojeros mediocres y viejos. ] NÉSTOR.- (Le ha abandonado y acaricia ahora los hombros de ROSA.) [ Con su mano estropeada, Cervantes se casó. DIONISIO.- Y como