desvanece. «¡Qué vergüenza! ¡La bicha me está comiendo el coraje!» Contempla esa redonda blancura sobre la almohada con el suave color de los morritos y el oscuro mechón en la frente. Violentísimo arrebato de ternura le arranca un sordo suspiro y encamina su mano hacia esa carita. Su dedo la roza y da un respingo reflejo, como si se hubiera quemado, porque, en la memoria carnal del dedo, esa mejilla ha despertado el tacto de una caricia
SON:082.03
ARRANCAR.3 - (Fig.) Obtener o conseguir [algo] con habilidad o esfuerzo