me a medio camino, recordé las palabras de Hyde, una noche que tuvimos la suerte de dormir bajo techo y en literas: "Nos tratan como a gusanos; cuando no estamos en loberas cavadas bajo tierra, ¡y qué chingados cuesta cavarlas en ese pedregal endurecido por la nieve!, reptamos sobre la tierra, arrastrandonos sobre nuestro estómago, nuestros huevos, para llegar quién sabe a dónde, a capturar a un enemigo que seguro se está cagando de miedo