obviamente, sino una gallarda incitación a la dignidad de espíritu, al desdén frente a los bienes y los poderes terrenales, a no imitar la insaciable codicia del Príncipe de Este Mundo rebajándose a disputarle o regatearle lasmiserablesmonedasdeltributo,concuyaentreganadaselequitaa Dios, a partir de una frase que no es, en fin, sino una provocativa expresión de arrogancia espiritual y de puro menosprecio por el César y por todas sus monedas, los albaceas del Nuevo Testamento se las ingeniaron
RAT:182.22
QUITARII.1 - Tomar o coger [algo] [a alguien] en contra de su voluntad