techumbre. Según Betina se trataba de los restos de una enfermería que allí hubo en los tiempos de esplendor del monasterio. No volvieron a presionar a Peter tras escuchar la firme decisión de éste y ver su evidente fatiga. Así queledejaronpartedelosalimentos,paraquecomiera a mediodía, pero él no quiso aceptar más que un par de tarros de yogurt. Cuando las dos parejas emprendieron la ascensión --Adriana y Marescu, Betina y Jano-- Peter ya