somos tiempo: somos inmortales. Ésa es nuestra condena: eternidad sin esperanza. YO: Somos hijos del tiempo y el tiempo es esperanza. Tras la ventana, las azaleas se habían fundido con la noche. Sobre la hoja de papel, en un hueco entre dos párrafos,advertíunapequeñamanchadetinta.Pensé: un agujero de luz negra. México, a 22 de marzo de 1983 I MÉXICO Y ESTADOS UNIDOS: POSICIONES Y CONTRAPOSICIONES POBREZA Y CIVILIZACION Si