me el favor de mirarlo. --Está bien --dije, y me coloqué frente al ángulo--. ¿Ahora qué hago? --Sepa, nomás, que está viviendo un momento solemne. Casi le digo: «Y viendo una telaraña.» Espesa, polvorienta,cubríaelángulo,aunacuartadelpiso. Comprendí que Brescia hubiera interpretado mi observación como una burla y procuré discutir en serio. --Que el cuarto se parece al que imaginé, la pura