siempre. Y sobre todo en el hombre difícil, impenetrable, despedazado por algún tormento o conflicto. En una palabra, en el hombre interesante. Ya dijimos al hablar de la soltería femenina que la muchacha «rara» o con complejos no solía ser cebo erótico;aunquelaacompañaraunfísicoagraciadoerauntipo que no interesaba a los hombres, vivía incomunicada. El hombre difícil y desconcertante también podía vivir aislado, pero en seguida se daba cuenta de que aquella actitud interesaba a las
USO:155.10
ACOMPAÑAR.3 - Añadir o complementar [algo o a alguien con otra cosa]