y redimida, ¿qué menos iba a hacer que dar las gracias? Y eran muchas mujeres las que las daban, porque la mayoría de la población femenina seguía manteniendo una actitud tradicional y conservadora, cosa que ya había quedado patente durantelaetapadelabreveRepública.Noconvieneolvidarque el voto femenino, conseguido por primera vez en España en las Cortes de 1931, tras dura polémica, fue una conquista más aparente que real de Victoria Kent, su más apasionado adalid. Algunos