le ha costado por las noches. Sí, aún son capaces de aprender sus dedos; aún no se le han oxidado las coyunturas... Contempla sus manos aferradas a la barra de la sillita como a un timón: recias, abultadas de venas,perovivasyágilestodavía.Comparaconlas manitas de Brunettino y entonces sí que se derrite su corazón. Esos puñitos, esos deditos, ¡cómo serán cuando derriben a un rival, cuando acaricien unos pechos jóvenes...
SON:126.11
COMPARAR - Examinar dos o más cosas para apreciar semejanzas, diferencias, etc.