en el momento adecuados. Pero dudo que en Francia, con un trabajo y un marido francés e hijos franceses a punto de iniciar su Bac, fuera mejor. Decia Julián: «Hay que gastar la vida; ésa es la única condiciónquevaimplícitaenelhechodenacer.¿De qué manera? Depende de ti», decía sonriente. Tú te irritabas. ¿O era al revés? Hay veces en que dudo y confundo las frases de Julián con las tuyas. Porque tú repetías