vuelto; estaba otra vez sentado frente a él. Juliá extendió los brazos y le pidió: --Ayúdame. El chico se levantó y le cogió por las dos manos; luego le agarró por la cintura y le preguntó: --¿Qué quieres hacer? Él contestó: --Marcharme.Marcharmeparasiempredeesta casa... Luego dio un traspiés y confesó: --Estoy completamente borracho. --Te pediremos un taxi --dijo el chico. --No,