las bombillitas y yo no tengo derecho al pandero de la verdadera Navidad, porque en Belén no había luz eléctrica... Si te pica, rascate. » El niño da el triunfo al viejo. Se lleva las sonajas alaboca,sí,peronoinsiste.Lashuele,incluso, pero no pasa de ahí. En cambio le entusiasma golpear el parche, sacudir el instrumento, escuchar su tintineo. Agita el pandero ante el pesebre con frenesí, dando