interpreta en el acto el mensaje. Se inclina hacia la manita y aspira conmovido la ofrenda. Una luz chispea en la mirada del niño que, a su vez, huele sus ungidos deditos. Así queda consumado, comprende el viejo, el mágico pacto. Unainmensaserenidadleenvuelvemástarde, acostado ya en su cama, hasta que le invade el sueño. Porque el niño ya sabe, y ha decidido confiarse al viejo. No hay más que hablar
SON:067.03
ENVOLVER - Rodear, cubrir total o parcialmente una entidad con otra