LA HECATOMBE Hasta entonces, el mal -para llamar de alguna manera a aquel conjunto sobrecogedor de circunstancias sólo inopinado en apariencia-, se había insinuado poco a poco, por etapas, de un modo sigiloso y a primera vista inocuo, quizá con el deliberado propósitodenoalarmaralosvecinos,sensibilizados, por la misma textura heteróclita del barrio, a la pérdida de su primitivo carácter familiar, casi íntimo, a causa de la penetración paulatina, la acción disgregadora