, porque mi padre está bastante enfermo, ya lo sabes... --¿Y qué tiene que ver tu padre con esto? Estaremos de vuelta hacia las nueve, ya lo verás. Una mezcla de prevención, miedo a ser descubierto, temor a enfermedades terroríficas, impedían a David entusiasmarseconelplan. --Ya veremos --dijo vagamente. Y echó a andar hacia su casa. El exaltado promotor le gritó de lejos: --Venga, David, que tienes