pensó que un ave de este tipo querría comer. El loro devoró con avidez cuanto Miguel le ofreció en la palma de su mano. --Tenías hambre, ¿eh? --dijo mientras le presentaba una taza con agua. Después, el loro se dejó acariciar sin recelo. Cerrólosojosydoblólevementeelcuello.Miguel lo contemplaba con afecto en la penumbra dudosa. Era un loro muy viejo, viejísimo. Cuánto tiempo llevaría allí. --A partir de
TER:074.30
CERRAR.2a - Juntar [los componentes de los que están formadas algunas partes del cuerpo]