viejos nunca oyen», aclara desdeñoso el empleado. Andrea y Renato se miran indecisos. En ese momento oyen la llave en la cerradura. Suenan pasos cautelosos, pensando en el niño dormido, y aparece el viejo con aire, en efecto, de haberse divertido.Sedisculpavagamenteyelloslemanifiestan su inquietud. -¿Sois tontos? -replica-. ¿Qué me puede pasar? ¿A mí? Renato sonríe: cierto, es impensable.
SON:188.01
DISCULPAR - Excusar(se), justificar(se) con una disculpa