» Hortensia sonríe divertida, mientras Andrea recobra el aliento. -Sí, ahora tiene gracia, pero pasé un rato fatal... Por fin mi suegro retrocedió por el pasillo y conseguí calmar a la muchacha, gracias a hablarle en alemán. Secalzólaotrabotaysemarchóconsujornal completo y diciendo que por atención a mí no le denunciaba... Salí con ella al descansillo y traté de desengañarla, explicandole el problema de mi suegro, pero fue