tesis sobre la persistencia de los mitos en el Mezzogiorno. «¡Nada menos que pervivencias de Edipo y su padre Laio!») -... se le escuchó desde fuera. El primer día cantaba así: Padres, sacadme de aquí que soy hijo verdadero, ynomerezcoestetrato por el amor que les tengo. El viejo lo ha canturreado con la misma salmodia que la zía Panganata, aunque los versos los recuerda de otra historia, la de una